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¿Recuerdas el Gumpert Apollo? Muy rápido, muy feo. Muy muerto ¿Recuerdas su concepto sucesor de 2016, la flecha de Apolo? Eso es un goner también. Esta es la cara nueva y absolutamente furiosa de Apolo. Se llama Apollo Intensa Emozione, porque suena mejor en italiano que “Extremely Moody” en inglés. Los TG pasaron un día hurgando en torno a la nueva creación; lo llamaremos el IE, para abreviar.

Limitado a diez unidades a medida, con un precio de 2,3 millones de euros al instante, el Apollo IE es un superdeportivo ilegal que solo se encuentra en la vía y que está aquí para lanzar a Apollo a la escena boutique exótica. Ya no está afiliado a Roland Gumpert, la compañía ha sido comprada y reinventada por el empresario de Hong Kong, Norman Choi, y ha creado lo que él describe como un nostálgico auto de carreras GT1 para el siglo XXI. No estás viendo representaciones de computadora aquí, por cierto. Tanto el ala gigante montada en la parte superior como el coche pegado al otro extremo sí existen, y hacen un ruido bastante aterrador.

Mientras que el horrible y viejo Gumpert Apollo cubría un chasis de acero tubular en paneles de carbón con lados planos, el IE recortado es todo fibra de carbono. Tina de carbono, cajas de choque de carbono delante y detrás (todo el chasis pesa solo 105 kg) y paneles de carrocería de carbono en la parte superior, del mismo proveedor que Pagani. Todo el automóvil pesa 1.250 kg, afirma Apollo.

Y gracias a un monumental 1.350 kg de carga útil neta solicitada a 186 mph, el Apollo IE puede usar el mismo truco de fiesta que el viejo y difunto Gumpert. Sí, podría conducir en el techo, teóricamente. Es curioso cómo nadie se atreve a probar eso, ¿eh?
El Sr. Choi le dice a TopGear.com que cree que la carrera por las potentes salidas de potencia turboalimentadas y la eficiencia híbrida que señala la virtud ha diluido el atractivo de los superdeportivos modernos. Él dice: “Solía ​​tener una colección de supercoches, pero me deshice de todo, porque nada me emociona. Todos conducen como Hondas “. Oof. Con garra. Eso explica por qué el IE tiene una planta motriz relativamente vieja …

 

La fuerza motriz proviene de un V12 de 6,3 litros montado en la mitad, que impulsa las ruedas traseras a través de una caja de cambios neumática Hewland de seis velocidades. El V12 es aspirado naturalmente, y no recibe un impulso electro-híbrido, a diferencia de un cierto hipercar italiano que podríamos nombrar (que también tiene un V12 de 6.3 litros que desarrolla exactamente 769bhp).

Los chicos de Apollo se callan bastante rápido cuando empiezas a preguntar de dónde viene el motor, especialmente si usas la palabra F (no, no esa palabra F). Se nos dice que el motor está relacionado con el proyecto F150 de Ferrari (whoops), pero ha sido completamente modificado por el socio de ingeniería italiano Autotecnica Motori. No hay marca de caballo que se encabrita. Así que no te atrevas a pensar que es un motor de Ferrari. ¿Lo tengo?

Gracias a una línea roja de 9,000 rpm y 560 lb pies, Apollo dice 0-62 mph en 2.7 segundos, y una velocidad máxima de 208 mph. Saludable, pero no escandaloso en nuestros tiempos retorcidos. Pero Choi y su compañía protestan porque el mundo está demasiado obsesionado con la velocidad bruta en línea recta (se pregunta en voz alta sobre las ambiciones de Hennessey de más de 300 mph más de una vez) y dice que su auto no debe perseguir las grandes velocidades. Se supone que debe rodear las pistas de carreras haciendo una enorme cantidad de ruido en su lugar.

Hablando de ruido, el escape triplete es un elemento impreso en 3D que cuesta, en palabras de Choi, “más que un BMW M4 completo”. La atención material al detalle en todas partes es bastante chiflada en realidad, muy parecida a Pagani en la obsesión por el carbono simétrico lacado y los componentes de metal anodizado. El compartimento del motor? Sí, eso está forrado con hoja de oro que refleja el calor.

La suspensión de varilla de empuje es totalmente ajustable. Hay un airjack incorporado. Los asientos son cojines que se adhieren directamente a la bañera de carbono, y el volante cubierto con botones y la caja del pedal se ajustan para ajustarse a las extremidades del conductor. Al igual que LaOther hipercar italiano, se supone que no debemos mencionarlo.

Apollo ha reunido a un equipo joven para crear el IE. El propio Norman Choi tiene solo 45 años, pero parece la mitad de eso. Su jefe de aerodinámica, que clasificó toda la carga aerodinámica utilizando la dinámica de fluidos computacional y el tiempo de túnel de viento cero, tiene 23 años. El diseñador en jefe es un británico de 27 años.

Sin embargo, otros ingenieros involucrados con las partes grasas están en sus setenta. Se supone que el IE es un superdeportivo que cualquier persona de todas las generaciones puede apreciar, ya sea que esté más interesado en la potencia, el ruido, el manejo, la ciencia de los materiales o los tiempos por vuelta. Dejaremos que seas el juez de eso.

Una vez que se habla de los diez EI Apollo completamente personalizados, la compañía pretende destilar lo que se ha aprendido en un automóvil legalmente más barato (menos), con la misma filosofía de pasión por el rendimiento que agrada a los entusiastas. Entonces, si nunca has seguido con la apariencia o el ruido de un Pagani Huayra, y los Koenigseggs son un poco demasiado rápidos para tu gusto, Apollo podría haber arrinconado a una parte del mercado de nobtanium.

Primero, será mejor que nos digas si provoca alguna, ejem, Emociones Intensas …

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